Muy bueno. Otra forma de decirlo es como se lee en algunos escritos: " el presente (o la vida) es eso que pasa mientras tu haces otros planes"
Muy bien!. Intento que cada día sea 1 de Enero. Cuesta, no es nada fácil, hay que estar empujándose a uno mismo diariamente, pero mi cuerpo sexagenario y, sobre todo, mi mente me lo agradecen. Calma, una brizna de sensatez, pensamiento positivo activo y no esperar nada de nadie ayudan mucho en "las cosas del vivir". Buen 2014 para tod@s.
LOS AMIGOS QUE SE CUELAN EN MI MURO Tengo cerca de 100 amigos en el Facebook a los que quiero un montón, por eso les tengo como amigos ¿pero por qué tengo mi muro lleno de mensajes del Dalai Lama y del Ghandi si no los he aceptado? ¿Por qué mi muro está lleno de perritos que buscan hogar si no tengo una perrera? ¿Por qué me pedís pastillas de fuerza en el Candy Crush? QUE-NO-TENGO-EL-CANDY-CRUSH-¡LECHE! ¿Por qué ponéis “estoy aburrido”…. o… ”Periodo para dar una vuelta de tuerca” o …”Está llegando el momento”… ¿El momento de qué cojona! ¿Se os ha atascado el teclado? Ya tengo libro para los días tontos de citas célebres, bíblicas, esotéricas, de amor, filosóficas, enigmáticas, metafísicas, extramatrimoniales y hasta citas con Sanitas…..no me mandéis más. Por favor. (Tono de clemencia compasiva). Contadme vuestras inquietudes, me encantan vuestras fotos, vuestras historias y vuestros viajes, vuestras cosas y vuestras guasas, pero *****, con el señor Ghandi, la bruja Lola,con Anónimo, el Aristóteles o el pesado del Paulo Coelho no tengo el gusto. Un poquito de piedad informática. Si eso. Bueno....haced lo que os dé la gana, para eso sois mis amigos.
vaya ignacio... a esa ruta por viango le tengo yo muchas ganas desde hace tiempo... y leyendo lo que cuentas, me da que este verano, cae
Vaya, somos vecinos. Yo tengo casa en Pancar. Habrá que salir a rodar Jajajaj Churri no has escarmentado. La próxima con tu bici nueva que estais muy mal acostumbrados los del CX
Crónica Picos de Europa (Tochón para ociosos) Salimos el martes 21 de julio furgoneta y media con 12 pax, 12 bicis, 36 pares de calzados, alforjas y 2 maletas de herramientas. Por delante nos esperan 5 duros días donde reventar altímetros, quemar piernas y castigar el cuerpo con muchas dudas sobre la posibilidad de completar la ruta, no todos tenían la forma adecuada para lo que teníamos por delante y era cuestión solo de saber cuando empezarían a surgir las primeras bajas. La previsión es ascender 9.000 m. de desnivel positivo acumulado y unos 200 km. parte andando, parte en bici. A las 3 llegamos a Panes, algo ligero para comer y acabar nuestro trayecto en coche en Sotres donde montamos nuestras bicis y emprendemos nuestra primera ascensión, 16 km. con un desnivel acumulado de 1.250 m. teníamos un gran viento de cara que nos hacía muy difícil mantenernos en nuestras bicicletas y consiguió tirarnos de ellas en varias ocasiones. Cuando llegamos nos acomodamos en 2 habitaciones en el refugio de Áliva, visitando antes el cable del teleférico. Ya en la cena dimos cuenta de unos espaguetis al cabrales para carbonatarnos el cuerpo y riego interior de nuestros cuerpos con un par de botellas de orujo y a domir entre los gritos nocturnos de Luis. Mañana nos toca una buena tunda. Nos levantamos tranquilos y algo sobresaltados por las conversaciones nocturnas en valenciano, en principio tenemos un gran desnivel acumulado por delante pero pocos km...... más tarde la cosa se complicaría. Nos acercamos hasta el mirador del cable, unas fotos y con mucho viento iniciamos marcha hacia el refugio Cabaña Verónica. Pasamos varios neveros, seguíamos con mucho viento y la ascensión se hacía dura. Llovía a intervalos, a mi me preocupaba el descenso por los Horcados Rojos, no sabía si en la cara norte habría mucha nieve e incluso el cable de seguridad para el peligroso descenso pudiera estar tapado por la nieve. Aquí es donde más muertes se han producido en el parque de Picos de Europa y el fuerte aire Alcanzamos el pequeño refugio de Cabaña Verónica donde Mariano, el guarda que durante 35 años lo ha vigilado y cuidado de los montañeros ha fallecido, ahora está custodiado por dos montañeros, uno de ellos, el más mayor pelín borde. Como el día estaba muy complicado decidimos no perder tiempo y tratar de llegar cuanto antes al refugio Delgado Úbeda, al pié del Urriellu. El guarda nos advirtió, la bajada era muy complicada y peligrosa dada la climatología y nos avisó que si sucedía algo no harían rescate en esas circunstancias. Yo seguía con mis dudas sobre el problema que se planteaba si había tramos de cable cubiertos por la nieve, solo llevábamos una cuerda de escalada de 30 m. y los mosquetones. En 20 minutos llegamos al collado donde ya se divisa el Urriellu, seguía soplando mucho viento que algunas veces nos hacía perder el equilibrio, un golpe de aire en el descenso y…..uffff. Nos enganchamos al cable y lo que me temía, un tramo estaba cubierto por la nieve, era un paso complicado de nieve helada de 10 m. de longitud con apenas 30 cm. de anchura, abajo….no había segunda oportunidad. Pasé en cuarta o quinta posición, aseguré lo mejor que pude clavando bota, dejé que la primera oleada de aire pasara y en un segundo, en cuanto calmó pasé. Quedaban muchos por detrás para pasar, cuando me di cuenta Nano ya estaba pasando y con verdaderas dificultades, su calzado no era el adecuado, apalancaba su rodilla contra la parte superior del paso y eso le podía hacer resbalar, la verdad, si alguien hubiera pisado mal o en ese momento el aire le desnivelaba se iba al vacío. Aguanté la respiración, se me hizo eterno el paso de Nano y cuando lo consiguió le dije a Dani que no pasara nadie más y que asegurásemos con la cuerda y los mosquetones el paso. Lo prepararon entre Dani y Juan Carlos y ya más seguros, pasó el resto del grupo. El resto del descenso ya solo las complicaciones del desnivel, pero asegurados con el cable de lo único que nos debíamos de preocupar es de no tirar piedras a los que estaban más abajo. Una de ellas, de gran tamaño nos vino directa botando de piedra en piedra hacia Luis y hacia mi y pasando a un metro de distancia a la altura de la cara de Luis. Ya abajo seguimos por el Jou de los Boches y poco después por el Jou Sin Tierra llegando a comer al refugio del Naranco, llevando hasta ese momento 10 km. pero con mucha altitud acumulada. El albergue tenía 4 habitaciones de 24 plazas cada una, cogimos media habitación, nos secamos, comimos y dado que era muy pronto, estaba lloviendo y poco había que hacer para matar el tiempo convinimos en seguir 15 km. más hasta Sotres aprovechando así la tarde y dejándonos la mañana del día siguiente para descansar y visitar alguna playa. La bajada se me hizo muy dura, el tendón rotuliano se me irritó del largo castigo de los grandes peldaños y apenas salir del refugio, lloviendo, con mucha niebla y aire ya iba cojeando y con gran dolor. La bajada se me iba a hacer un infierno y lo que más me preocupaba, podía, si no conseguía recuperarme dar por finalizado mi viaje, pero de momento lo que me debía de preocupar es en lo que me quedaba por delante. Santi me hizo una reparación de emergencia sujetándome con una cinta tensora la rótula y bajando el último y sufriendo cada paso que daba fui avanzando. Solo descansaba en las pocas subidas que había, pues en posición de subida el tendón no trabajaba, y otras veces descendía de espaldas, que tampoco me dañaba hacerlo y la rótula descansaba. Llegué al pueblo con 90 minutos de retraso sobre el primero en los 15 km. de infierno, vernos a Oscar y a mi entrar en Sotres era un espectáculo, cojeando y arrastrando la pierna izquierda por el asfalto. No podía dar por terminado el viaje así que aunque no me gustan mucho chutarme porquerías me metí 2 Ibuprofenos intentando evitar la inflamación y con la tranquilidad que me daba tener toda la noche y la mañana para poder recuperar me acosté animado y pendiente de las conversaciones que Luis se traería esa noche con su almohada y de las que se enteraba todo el albergue. Para mi ha sido la ruta más dura que he hecho andando en mi vida, no por el kilometraje que no era excesivo, solo 25 km. pero si por el desnivel acumulado, 2.250 m. y la lesión, pero allí estaba, bastante optimista pues por lo menos no estaba cansado. Al día siguiente fuimos a la playa de Andrín donde los amantes del líquido se bañaron, comimos en un chiringuito y recibimos a Manolo que se incorporaba al viaje con fuerzas sin gastar, dándonos tralla y poniéndonos retos, por lo que tuvimos que trucarle la bici para cansarle un poco y sin que se diera cuenta le bloqueamos 3 piñones y le metimos unas pesas de gimnasio en la mochila. Llegamos a Sotres e iniciamos la subida, antes de iniciar el ascenso había que descender 3 km. con mi rótula era un castigo por lo que yo dije que me dejaran allí para no castigar en la bajada la rodilla y así solo tener que hacer los 9 km. de subida pero entre bromas me dijeron que si no hacía los 3 km. sería apeado de conseguir el reto de completar la semana programada, por lo que decidí salir desde arriba y bajé tranquilo no sin antes mandarles a paseo, ya recuperaría en el ascenso. Subimos todos andando y Manolo con su bicicleta, sus pesas y sus piñones trucados. Llegamos a Áliva donde sumamos otros 9 km. y otros 900 m. de desnivel acumulado. Al día siguiente nos tocaba la etapa estrella, 80 km. y casi 3.000 m. de desnivel positivo con grandes rampas inciclables y de meter riñones y donde daríamos completamente la vuelta al macizo oriental con cotas desde 200 m. sobre el nivel del mar hasta cerca de los 1.600 m. en cota de Áliva. Llegamos tras 10 km. de ascenso por una carretera de montaña y por una rota pista que nos iba socavando fuerzas al refugio de Ándara, un viejo casetón de madera donde cobramos fuerzas tomando unas barritas. Seguimos luego un largo descenso entre hayas y donde enfrente veíamos la subida a Tresviso con sus grandes zig-zag. Luego un vertiginoso descenso hasta Bejes y……¡a sufrir! delante de nosotros se nos plantó una pared de 2 metros de ancho y desniveles que llegaban hasta el 30%. dos kilómetros y medio por delante hasta llegar al Collado Pelea y que nos dejó exhaustos cuando solo llevábamos apenas 40 km. de ruta y teniendo por delante lo peor. Desde aquí otro brutal descenso por pistas de cemento que nos dejó en la cota 200 y nuestros frenos quemados, algunos los perdieron del desgaste. Llegamos a Potes y de aquí siempre subiendo alcanzamos Mogrovejo donde comimos un bocadillo y tomamos un respiro antes de acometer nuestros últimos 25 km. con 15 de ellos de un ascenso durísimo, con grandes rampas y sin dar descanso. Cada uno subió a su ritmo, a mi la rodilla no me molestaba pero el sufrimiento fue grandísimo, solo tocaba empujar bicicleta, mirar al suelo y esperar que eso acabara alguna vez. A las 8 llegamos a Sotres. Anteayer fue la etapa más dura andando de mi vida y esta ha sido la más dura en bici que haya hecho nunca. Nuevo día, hacemos unos remontes en coche hasta el Collado Pandébano y luego tras 500 m. de subida en bici iniciamos un duro descenso hasta el pueblo de Bulnes y de aquí hasta el inicio de la ruta del Cares en Puente Poncebos. La bajada totalmente inciclable, peligrosa, con grandes losas de piedra empapadas que nos hacía resbalar y caer, totalmente empapados, embarrados y hasta Bulnes de los 4 km. no fui sobre la bici más de 500 m. y el resto bajando grandes peldaños. Los que subían flipaban y uno me dijo ¡que! ¿paseando la bici? Ya en Bulnes era un poco más ciclable pero la caída a la izquierda era de las de que no dan segunda oportunidad, un solo fallo y se acabó. Seguíamos cruzándonos con senderistas que no daban crédito a lo que veían, alguno dijo que estábamos realmente chalados, que un recto allí, y al precipicio. Tras una curva me encontré a Deivid en el suelo y la bicicleta con una de las ruedas girando en el vacío, me recorrió un escalofrío, después del susto del cable días antes y ahora ver a nuestro mejor bajador en el suelo me superaba, así que di una voz a todos y nos bajamos de las bicis, se acabó de jugárnosla y lamentar el viaje de por vida. Bajamos andando y en Puente Poncebos seguimos otros 8 km. hasta Arenas de Cabrales donde comimos y el pavo del hospedero nos despachó bien despachados con una cuenta de 60 pavos por res que nos destrozó el presupuesto, hasta ese momento contenido y muy bien controlado por Julio y “desde arriba” por Zapatillas que no nos dejaba tomarnos más de 3 vasos de orujo por cabeza. Yo el cuarto me lo bebía a escondidas mientras los demás le entretenían y ya a 4 patas me iba a dormir. Antes, por eso de sumar km. subimos 4 km. andando de paseín hasta Covadonga pues queríamos llegar a los 8.000 metros de desnivel acumulado aunque fuese yendo de compras. Aquí la ruta había terminado, por lo que mis zapatillas no daban más de si y decidí que acabaran sus días en Covadonga, bajo el Santuario, que bonito lugar para la muerte de unas zapatillas, así que las mandé a paseo en una papelera y…….¡vaya por dios! Manolo ha tenido una ideita de las suyas. ¡Ignacio recoge tus zapatillas! ¿Qué pasa! ¿Para que? Mañana antes de hacer el descenso del Sella en canoas nos ponemos el despertador a las 6 de la mañana y nos subimos a los Lagos de Covadonga. Uno que es tonto por estudios y meritación propia y no sabe decir que no pues nada, a rescatar las zapatillas entre los restos de helados de la papelera y la atenta mirada de la tendera y a preparar la ropa de bici otra vez que estaba en la bolsa de la ropa desahuciada. A la mañana siguiente, los menos desganados emprendimos a las 6 de la mañana el ascenso a Lagos sin más desayuno que las barritas energéticas que todavía nos quedaban y en oscuridad total, con una niebla de flipar y sin iluminación a sufrir 2 horas. Yo llegué penando como un perro, mi corazón se había puesto ya en “posición avería” y no subía a pesar de los grandes repechos de 135 pulsaciones, me hice la foto de rigor y me bajé que allí no se me había perdido nada. Total según mis cuentas: - 150 km. de bici. - 45 km. andando por uno de los lugares más duros de España. - Más de 8.000 m. de desnivel positivo acumulado. - Casi 20.000 calorías quemadas y la satisfacción: prueba superada. Una mención especial a Oscar, un luchador. Después de verte como estabas el día de la pateada no daba un duro por ti. ¡Mi admiración tío! Y me alegra un montonazo haberte visto disfrutar como lo has hecho, para mi solo por ello ya ha merecido la pena este viaje. Y para los demás también por supuesto, cada uno ha buscado en estos días una cosa y espero que todos la hayamos encontrado de una forma u otra, disfrutado, y a ninguno os haya defraudado. Pero esta vez Oscar para mí: Se ha salido.
Te toca luchar compañero Un recuerdillo... Me lo ha contado emocionada Chelo, mi mujer. Un compañero de 23 años, un chiquillo feliz, un deportista, que la desgracia no le ha hecho perder la sonrisa. Salió en Telecinco, participaba en una importante carrera y un fallo le echó a la cuneta. El infortunio hizo que esa maldita cuneta tuviera la protección metálica que tantas desgracias ha traído en nuestra afición y en la de nuestros compañeros motorizados. Nuestro chiquillo con 23 años, perdió de cuajo su pierna, trató de levantarse y seguir en carrera, pero....no tenía pierna, la maldita protección se la quitó. Con un alarde admirable de dureza, de optimismo, de fuerza, lo contaba a las cámaras desde el hospital donde se recupera, con su sonrisa, con sus heridas aún por cicatrizar nos contaba que ahora tiene que prepararse duro para las Paraolimpiadas. A la pregunta de ¿cómo estás así de entero? Respondió ¿Cómo queréis que esté? ¿Queréis que mi familia se hunda? Lo único que deseo es que mi familia me vea con la cabeza muy alta. ¿Qué vamos a hacer ahora papá? Preguntó. ¡Seguir adelante hijo, contestó su padre.
Y nos lo venden como que están ahí puestas para protegernos. Ánimo al chaval y su familia. Un saludo.
Los Consejeros de los foros. Ya llevo 9 años leyendo el ForoMtb y ya he aprendido a filtrar el rollito este de los foros y los Consejeros Reales. Unas veces por llenar tema, otras por conocimiento real, lees de todo, desde los criterios más fundados y sólidos, hasta las más soberanas soplapolleces que no sé como no sonrojan al que las suelta. Es criterio general de recomendar, como si en ello te fuera la vida, lo último que el Consejero Real se ha comprado como la panacea misma, convirtiendo desde que le han pasado la Visa por el visor, un cacho de hierro en el mismo fundamento de la vida. Amo a vé, que no me cuentes lo que te has comprado, que no es eso lo que te estoy preguntando. Sorprende, que ese cacharro (porque son cacharros) que ayer era la evolución propia del ciclar en su máxima expresión, hoy ya es obsoleto y ha sido mejorado -así, en 3 meses- por lo que el Consejero se acaba de comprar hace dos horas, y a veces, es curioso que el cacharro de ayer que era el "no va más", hoy, como mucho llega a ****** pinchada en un palo comparado con lo que me acabo de comprar. Valga de ejemplo un simple paseo opor la sección de Enduro. Es para flipar lo que evoluciona la técnica en la mejora de los hierros con mecanismo rodador o un componente de un año para otro, ¡incluso de un día para otro! a tenor de los comentarios y análisis del personal. Lo que no sé es como con tanta evolución las bicicletas siguen teniendo forma de bicicleta. Entre una biela del 2.012 y una del 2.013 el ciclar es como la noche y el día en cuanto a elasticidad y torsionalidad, pero cuando llega la del 2.014 la otra pasa a categoría "palo escoba". Ya no torsiona ni flexa. Putadón...200 pavos. Igualmente si hablamos de una tija (cilindrillo que sustenta la almohadilla donde depositas el ano, sin más). O de un eje, (cilindrillo para que la rueda de la bicicleta rote) que los puede haber rápidos, semirápidos, mediamanga o manga entera. Un manillar, hierro que se coge con las manos para dirigir el cacharro por extensión o flexión del brazo, ¡Pero que sensaciones!....¿Flow? ¿Y los frenos del 2.012? ¡Ay los frenos del 2.012! que dejan en chiriflollos a los del 2.011 no solo en su sentir, sino también en su parar, si los de diciembre de 2.011 eran auténticas máquinas de parar un tren, los del mes siguiente, los de enero del 2.012 ya son de orgasmo. ("Orgasmo" es más que "parar tren"). Ni que hablar de los tamañitos de las ruedas, 26" las 29", las 27.5".... y las que vendrán, eso ya es para mearse las mamonadas que se leen de si suben por sitios imposibles y bajas como ninfa propiamente dicha por la peor de las trialeras, algo que ya no conseguirás jamás con una 26". ¡Pero ****! que es un círculo que da vueltas y avanza sobre el terreno, que solo la han cambiado un poquito el tamaño para sacarte mil pavos y que tenga el diámetro que tenga no es un prototipo de la NASA. Es una rueda. Lo que ya usaban hace 5.000 años los que tenían cara de mono. Cuando pidais consejo en los foros (Ay angelitos míos), meted toda la información recogida en un bote, barajad y sacad la media, después dividid entre 10 y el resultado tendréis alguna probabilidad de acertar....o no, con lo que realmente necesitais. Después de unos años rondando por ese foro, la de chorradas que puedes llegar a leer, principalmente de los "que más saben" o más dicen saber. Saber no sé si saben, pero escribir se les da de perlas, e igual alguno hasta monta en bicicleta entre tesina y tesina, porque los hay, y les conozco, que ni montan salvo para ir a por el pan o lucir sus 9.000 euros de chatarra elaborada. Pedid consejo en los foros que en algún caso acertaréis. Solo tenéis que descubrir cual es el bueno y cual el estúpido. Lo tenéis ******.
Crónica de mis 24 horas de Moralzarzal Mi primera prueba de resistencia. Las previsiones vaticinaban lo peor, lluvia recia las 24 horas. Yo entiendo más bien nada que poco de este tipo de pruebas, pero pienso que si es una prueba de resistencia, cuantas más circunstancias adversas haya mayor es la satisfacción si consigues terminarla. Era mi deseo y mi esperanza, cuanto peor tiempo, mejor para mi. Cuando no se puede competir por físico es cuando puedes ganar por cabeza, cuanto más lloviese mejor puesto haría, los participantes irían cediendo y retirándose de poco en poco. Una gran cantidad de participantes que he leído sus comentarios en foros y en persona han despotricado de la prueba diciendo que se tenía que haber anulado, que eso era inhumano, que si las bicicletas sufrían, que si dormíamos sobre el barro, con ropa mojada, que el terreno impracticable, peligroso, que si ha sido la prueba más épica de las 5 ediciones. Me empecé a preocupar cuando se corrió el rumor sobre las siete de la tarde de que suspenderían la prueba ¿Esto no es una prueba de resistencia? ¡No entendía nada! Finalmente dieron por los micrófonos que la prueba en ningún caso iba a ser suspendida, había infraestructura suficiente sanitaria, -algo que no pasó en la anterior y por eso la anularon- y por tanto se podían atender los accidentes. Después oí que la anulaban de 12 de la noche a 8 de la mañana por el peligro que entrañaba el circuito en el estado que estaba. Yo flipaba, ¡pero **** esto no es una maratón, ni una prueba de rally, ***** que esto es una prueba de resistencia, cuanto peor esté el terreno más honor hace a su nombre! Me fui corriendo a la organización y les pregunté, dijeron que era un bulo, la prueba duraría las 24 horas. Bufff, respiré. Especialmente me ha llamado la atención que los que más han protestado por el estado del terreno y la climatología y los más fervorosos de su anulación era los que hacen buenos puestos en competición. Se retiraron muchos por este tema. Yo pienso que en las pruebas normales ya hacen muchos podios, esto es otra cosa ¿porqué no probar que puesto sacan en una prueba extrema? No sé, he leído muchas excusas para las retiradas, achacando al sufrimiento de la bici cuando yo pienso que la que flaqueaba no era la bici sino la cabeza. ¿Porqué anularla si algunos queríamos disputarla? La puerta estaba abierta para que se retirase el que quisiera y de eso se trataba, de debilitar las cabezas. Abrí yo la carrera, mis compañeros saben que rindo mejor por las mañanas que por las tardes y al ser el más débil, el puesto que hiciese en mi turno sería el peor de la prueba. Hice mis 2 vueltas y nos pusimos en la clasificación en el puesto 46 de los 92 equipos que participábamos en nuestra categoría. Sabía que esa iba a ser nuestra peor clasificación, a partir de ahí, a trepar posiciones ¡Por la fuerza de mis compañeros, y porque nosotros íbamos a terminarla, si o si! Me relevó Carlos y después Manolo y ya estábamos los 37. Dimos nuestro segundo turno de otras dos vueltas los tres, dado que Juan Carlos tenía un bautizo y no entraría en carrera hasta las 10 de la noche. Cuando terminamos la segunda ronda ya estábamos los 27. Los participantes por las intensas lluvias y lo complicado y peligroso que se puso el circuito empezaban a recoger sus carpas y marcharse a casa. Todavía estábamos muchos en carrera porque aún estaban en la prueba los que solo iban a DOCE HORAS, pero sabía que a partir de las doce, de los cerca de mil participantes que estábamos en las instalaciones habría menos de cincuenta rodando. El terreno ya era impracticable, riadas de agua corriendo por los regueros y chocolate que hacía girar la rueda en vacío, poner al límite las trasmisiones y desgastarnos brutalmente sin casi avanzar. Los charcos peligrosísimos, había que echarse muy atrás para no clavarse y salir volando por encima del manillar. Inicié yo mi tercer turno ya de noche, daría solo una vuelta y a mi llegada estaría ya Juan Carlos para iniciar carrera. Fue una vuelta durísima, los metros se me hacían km. Las partes técnicas peligrosísimas sin luz y con un barro muy deslizante.....hubo que "tirar de manual". Cuando llegué me dicen que Carlos se ha retirado de la carrera y se ha ido a su casa, y JC vestido de calle esperando mi llegada para decidir. Fue nuestro momento “barrita”. ¿Qué hacemos? me preguntaron. Yo me quedé a cuadros. ¡Seguir! ¿Cuál es la otra opción ? Ahora es cuando si seguimos "entramos en carrera" y con posibilidades de hacer algo digno, TERMINAR. Fue un bajón importante y estuvimos a punto de la retirada pero pensé que ese era mi terreno. Éramos 4, ellos ponían las piernas, yo tenía que poner algo y lo único que podía poner con estos tres puras sangre era la cabeza. Juan Carlos no se lo piensa dos veces y Manolo está de acuerdo y tampoco flojea. JC se cambia (con mucha tranquilidad....capullo) y se mete un carrerón nocturno de 4 vueltas seguidas en ese **** infierno. Yo me voy a la una a tirarme un rato con una colchoneta al polideportivo. Le digo a Juan Carlos que corra lo que quiera y que a las 6 arranco yo. A las 4:00 me despierta un SMS. "Me voy a dormir al coche, cuando arranques llámame para que te dé el chip". A las 5:30, antes de que me suene el despertador me levanto anquilosado. Busco a Juan Carlos, entumecido y dolorido se me alarga mucho la cosa, no encuentro las gafas, ni el pulsómetro, el chubasquero está embozado y no cierra la cremallera, no razono bien, me cuesta coordinar todo lo que por agotamiento no preparé antes de echarme a dormir. A las 6:15 me encuentro a mi mismo, aunque tan mal estoy que se me olvida desayunar algo, me acuerdo a los 5 minutos de carrera de que estoy en ayunas ¡de **** madre! Tan mal ando que para entrar en carrera le tengo que preguntar a una chica que por donde entro, me señala cariñosamente con el dedo el lugar y me dice: ¡Que mal están ya las cabezas eh!! Lo que ayer hice en 45 minutos lo he hecho ahora en una hora y tres minutos, la cabeza va bien, las piernas también pero noto el corazón alto de vueltas y me falta pulmón. Era una carrera en solitario prácticamente, estábamos muy pocos en carrera y extendidos en los 12 km. del circuito. a lo lejos se veían las lucecillas de los compañeros en carrera, las lucecillas a alcanzar. Me releva JC nuevamente que se mete dos vueltas, luego otra vuelta Manolo. Seguimos escalando posiciones, aunque ya somos pocos los equipos vivos y cuesta avanzar en la clasificación. Finalmente Carlos que durante la noche en su casa seguía la clasificación a ver si nuestro contador sumaba vueltas, y como vió que seguíamos vivos se viene y corre de 10 a 11:30 sumando dos vueltas más que nos llevó a la definitiva posición número 20. Ni de lejos soñaba con ese puesto con mis posibilidades físicas. Lo hemos conseguido. Solo decir a todos los que estáis compitiendo regularmente y que os habéis retirado que yo es la primera vez que compito en una prueba de resistencia, que quizás no entienda de que va, pero entended que es la única posibilidad que tenemos los de la “clase tropa” de luchar en una competición y de batirnos contra vuestras piernas. Para mi hizo un día de "pena", al empezar no llovía. Y "empeoró" mucho más el domingo ....salió el sol. Esto desde mi ignorancia es una prueba de resistencia, lo demás.... Bambi. Me encanta esta foto. Es de Juan, Juanillo para los que le queremos. La tituló: "¡Terminó!"