Son de tal magnitud mis deseos de for- malizar mis relaciones con Vd., que gozo en comu- nicarla a todas horas del día, que daría mi po- bre corazón, perturbado ante una joven tan be- lla, por dar gusto a mis grandes y poderosos co- nocimientos que se ven atravesados por agui- jones. He sido informado de que usted es tan pu- ra así como amable, modesta, simpática y boni- ta, que espero que no ponga resistencia a mi na- tural carisma, mi gallarda presencia y mi gar- bo, que es capaz de destrozar el más fuerte co- razón, que sienta tan solo un leve y mínimo cari- ño. Esperando a unirnos sentimentalmente y pre- ferentemente sin más demora, permítame acompa- ñarla a la hora y sitio que Vd. tenga por gusto. Un admirador. Si fuere menester que la mujer que lo recibiere no quedase satisfecha, recomiéndenle que lea tan solo las líneas impares.